Siempre que una empresa u organización decide formalizar sus iniciativas de innovación surge una duda recurrente: ¿debe crearse una gerencia para que lidere este proceso?
En primer lugar es importante mencionar que la meta de toda organización debería ser la de llegar a generar capacidades de innovación en todas sus áreas de gestión. Este ejercicio requiere de un proceso de gestión, de un acompañamiento cercano para garantizar que las iniciativas no se diluyen entre las urgencias del día a día del negocio. Y esa gestión, en mi experiencia profesional, requiere de un responsable.
Y aquí es donde la cosa se torna un poco confusa en la ejecución: ¿es esa persona, entonces, el o la responsable de la innovación dentro de la empresa? La visión generalizada suele ser que sí y los resultados pueden ser dañinos a la meta original. ¿Por qué? Porque esta posición implica nombrar (o contratar a alguien nuevo) que tenga habilidades a lo "Steve Jobs" y que sea el genio residente en la organización. Luego la empresa espera que este individuo sea la fuente de toda nueva innovación y genere resultados tangibles en un cortísimo plazo.
¿El resultado? Incluso cuando alguien decide enfrentar ese reto, la realidad es que termina convirtiéndose en un cuello de botella porque sus esfuerzos individuales no alcanzarán a responder a las necesidades de toda la empresa. Y si efectivamente es un verdadero genio, se corre el riesgo de que la competencia se lo lleve, con las penosas afectaciones a la estrategia de nuestra organización.
Pero existe otra realidad innegable: la innovación no es el resultado de la genialidad de un solo individuo. Steven Johnson lo explica mejor en su charla TED "¿De donde vienen las grandes ideas?": la innovación es el resultado de la creatividad de equipos multidisciplinarios. Ni Isaac Newton, ni Charles Darwin llegaron a sus famosas teorías por sí solos (aunque nos han convencido de que fue así).
Entonces, ¿cuál debería ser el rol de un encargado de los procesos de innovación? Desde mi perspectiva, debería ser la persona a cargo de gestionar la innovación casa adentro, de acompañar a los equipos que requieran apoyo con metodologías y herramientas para innovar y de empujar una hoja de ruta que genere un portafolio de nuevos productos y servicios que impacten a la empresa.
¿Qué reto debemos enfrentar primero: implementar transformación digital en la empresa, o hacer innovación?
La innovación disruptiva ha llegado a múltiples industrias en todo el mundo y la financiera no es la excepción.
Uno de mis más grandes anhelos ha sido que nuestro país pueda ser reconocido como una potencia tecnológica. ¿Qué podemos aprender de Israel, la Startup Nation?
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